En su último minuto como jugador, "El loco" Palermo amargó a Gimnasia y dijo que empieza "un nuevo camino.
El delantero de Boca, Martín Palermo aseguró que empieza "un nuevo camino" tras jugar anoche su último partido como futbolista profesional y asistir a Christian Cellay en el agónico empate 2 a 2 que condenó a Gimnasia de La Plata a jugar el desempate por descenso frente a Huracán.
"Uno se va contento porque dejo todo. Fue un partido muy especial, pero no termino de caer ni de darme cuenta de lo que se me terminó. Ahora empieza un nuevo camino para mí", expresó Palermo.
Luego el jugador habló acerca de las suspicacias que se generaron en torno al encuentro entre Boca y Gimnasia La Plata y dijo: "El fútbol tiene estas cosas, hay que darle el valor a lo que hace cada jugador dentro de la cancha que se manifiesta en estos resultados, estas definiciones".
"El fútbol a veces no es como muchos creen, que no hay que confiar en jugadores y en técnicos. Este es el verdadero fútbol, el impredecible, en donde nunca se sabe qué va a pasar", aseveró.
Más tarde Palermo señaló: "Me hubiese gustado que fuese otro partido, otro rival y otra situación porque tuve muchas sensaciones debido a que estaba Guille (Barros Schelotto) enfrente".
Palermo, hincha reconocido de Estudiantes de La Plata, esta tarde apareció para amargar al "Lobo" platense, equipo donde juega su amigo Guillermo Barros Schelotto .
Cuando se moría el encuentro, el ex delantero "Pincha" recogió un centro en el segundo palo y habilitó a Cellay -hincha de Huracán y ex jugador de Estudiantes- que marcó la igualdad y quebró el ánimo de la gente del "Lobo".
Antes del comienzo del encuentro, Palermo, en su despedida profesional de las canchas, y el "Mellizo", se fundieron en un emotivo abrazo.
Además, los dirigentes "xeneizes" le entregaron al delantero una camiseta del club que tenía inscripta la leyenda "Gracias" en la espalda.
El delantero de Boca, Martín Palermo aseguró que empieza "un nuevo camino" tras jugar anoche su último partido como futbolista profesional y asistir a Christian Cellay en el agónico empate 2 a 2 que condenó a Gimnasia de La Plata a jugar el desempate por descenso frente a Huracán.
"Uno se va contento porque dejo todo. Fue un partido muy especial, pero no termino de caer ni de darme cuenta de lo que se me terminó. Ahora empieza un nuevo camino para mí", expresó Palermo.
Luego el jugador habló acerca de las suspicacias que se generaron en torno al encuentro entre Boca y Gimnasia La Plata y dijo: "El fútbol tiene estas cosas, hay que darle el valor a lo que hace cada jugador dentro de la cancha que se manifiesta en estos resultados, estas definiciones".
"El fútbol a veces no es como muchos creen, que no hay que confiar en jugadores y en técnicos. Este es el verdadero fútbol, el impredecible, en donde nunca se sabe qué va a pasar", aseveró.
Más tarde Palermo señaló: "Me hubiese gustado que fuese otro partido, otro rival y otra situación porque tuve muchas sensaciones debido a que estaba Guille (Barros Schelotto) enfrente".
Palermo, hincha reconocido de Estudiantes de La Plata, esta tarde apareció para amargar al "Lobo" platense, equipo donde juega su amigo Guillermo Barros Schelotto .
Cuando se moría el encuentro, el ex delantero "Pincha" recogió un centro en el segundo palo y habilitó a Cellay -hincha de Huracán y ex jugador de Estudiantes- que marcó la igualdad y quebró el ánimo de la gente del "Lobo".
Antes del comienzo del encuentro, Palermo, en su despedida profesional de las canchas, y el "Mellizo", se fundieron en un emotivo abrazo.
Además, los dirigentes "xeneizes" le entregaron al delantero una camiseta del club que tenía inscripta la leyenda "Gracias" en la espalda.
Fuente: Diario EL DIA
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