Ocho días antes había llegado en coche Pulman desde Retiro a La Plata, el ex presidente
de EE.UU. Franklin Delano Roosvelt. Como visitante ilustre, las autoridades de la
época le ofrecieron hasta una gala de honor en el teatro Odeón.
El domingo 23 de noviembre había fútbol para disfrutar en la ciudad: por la Segunda
División de la Asociación Argentina de Football jugaban Independiente de La Plata
frente a Nacional II de Montevideo. Sería victoria para los de nuestra ciudad por 3 a 1.
Otro partido concitaba igual o menor expectativa, de acuerdo a la cobertura periodística
de los incómodos diarios de la época. En cancha de Gimnasia y Esgrima de Palermo,
ubicada en Avenida Dorrego y Coronel Freire, el líder el campeonato de Primera
División de la Federación Argentina de Football, Estudiantes de La Plata, definía el
título con Argentino de Quilmes, su único escolta a dos puntos de diferencia hasta ese
momento (otros equipos tenían partidos pendientes).
Ya había dejado de jugar Alumni, el multicampeón del amateurismo criollo, y los
equipos estaban nucleados en dos ligas: la Asociación, donde participaba Gimnasia de
La Plata, Racing, River, San Isidro y Estudiantes de Buenos Aires, entre otros; y la
Federación, con el Estudiantes platense, Atlanta, Kimberley, Tigre e Independiente,
entre otros. Era 1913.
En Palermo, Argentino de Quilmes ganaba el sorteo ante la presencia del árbitro
aficionado Guillermo A. Jordán y unos 5 mil espectadores, elegía jugar el primer tiempo
con viento a favor. Estudiantes, que dos años antes había ganado el ascenso, mantenía el
equipo base con varias figuras: el arquero Emilio Fernández, a la postre el héroe de la
tarde; Julio Lamas Illande, infalible goleador; Jorge Hirschi, luego presidente entre
1927 y 1932; Diómedes Bernasconi, figura en la victoria de la Selección 1 a 0 ante
Brasil por la Copa Roca en 1914; y Carlos Galup Lanús, capitán de estirpe, entre otros.
En la formación quilmeña sobresalía la figura del centroforward Dannaher, uno de los
goleadores del campeonato, que apenas constaba de diez equipos. Era un “temible
rival”.
El diario La Prensa del lunes 24 brinda una descontextualizada cobertura periodística
del partido. Informa, por ejemplo, que “Gascón movió la pelota” y que a los 7 minutos
Galup Lanús salvó un “entrevero” en el área. Jugaba mejor Argentino de Quilmes y a
los 10 se pondría en ventaja luego de una falta que el mismo Galup le cometió a
Arrillaga dentro del área. A. Badaracco tiró cruzado y transformó en gol el “penaltykick”.
Recién a los 18 llegó Estudiantes con un “puntapié libre” de Oscar Hirschi (en muchos
lugares aparece escrito con s al final, como en La Prensa, era el hermano de Jorge).
Cinco más tarde Fernández le tapó un mano a mano a Dannaher. Era una “hermosa
lucha que la concurrencia premió constantemente”. Pero el equipo de La Plata, que
había perdido un solo partido, ante Kimberley, quería el empate. Llegó a los 21 del
complemento (definición de Hirschi tras preciso pase de Lamas), luego de varios
sofocones: Polimeni había reventado el travesaño y Arrillaga desperdiciado el gol con el
arquero vencido.
Jordán, quien mereció un “justiciero elogio” marcó el final y la consagración para
Estudiantes. Era su primer título de Primera División, con apenas ocho años de vida y
todavía sin apodo. Esa tarde de gloria formó con: Fernández; Pastor y Galup Lanús
(cap); Bernasconi, Ferreiroa y Duarte; H. Isla, Bottaro, Gazcón, Lamas y Oscar Hirschi.
En ese entonces no había técnico.
Como campeón del torneo de la Federación, Estudiantes obtuvo el derecho de jugar la
Copa Río de la Plata frente al ganador del certamen uruguayo. Con goles de Jorge
Hirschi (2), Ricardo González Bonorino y Lamas, venció 4 a 1 a River Plate de
Montevideo y así se quedó con su primer título internacional.
Ese equipo de Estudiantes fue un verdadero suceso en el fútbol vernáculo. Tanto es así,
que el 13 de septiembre de 1914 la Selección tuvo a cinco de sus hombres en el misma
alineación, en la victoria 2 a 1 ante Uruguay: Lamas, Bernasconi, Galup Lanús, Delfín
Lascano (marcó uno de los goles) e Izaguirre (no jugó ningún partido en 1913, pero era
de Estudiantes). Roberto Leonardi, el arquero Fernández y Ricardo Naón también
fueron convocados en otras oportunidades al combinado nacional.
Ese mismo año terminó invicto el campeonato de la Federación, pero fue segundo a tres
puntos del campeón, Porteño. Luego de este torneo, Estudiantes se afilió a la
Asociación: en el primer torneo terminó quinto y Racing ganó el título.
Para ese entonces, a Estudiantes ya se lo conocía como la “escuela platense”. Hoy
muchos deberían rendirles honores a estos caballeros fundantes del Club.
Fuente: Revista Animals!
No hay comentarios:
Publicar un comentario