Con apenas 19 años, Michael Hoyos ya es una de las principales alternativas de recambio para Sabella. "Acá crecí mucho", contó.
Su documento dice que su nombre completo es Michael Ryan Hoyos, y que nació el 2 de agosto de 1991 en Fountain Valley, Estados Unidos. Hoy, con apenas 19 años, y luego de alternar entre la Cuarta y la Reserva, parece haberse afirmado definitivamente en Primera división. Claro, la jerarquía de los jugadores que tiene el Pincha en el mediocampo ha hecho que, muchas veces, tenga que esperar su chance sentado en el banco. Pero con su fútbol y su desfachatez se ha sabido ganar la consideración de Alejandro Sabella. Y hoy, con una decena de partidos en la máxima categoría de nuestro fútbol, y un roce internacional con las selecciones juveniles, es una alternativa importante para el DT albirrojo. A tal punto, que iba a ser titular frente a Lanús, antes de la postergación de la fecha.
El pibe habló con El Clásico Radio y contó sus sensaciones sobre su presente y el de Estudiantes. La charla arrancó bien futbolera, con Michael contando dónde le gusta jugar. “Tengo la suerte de jugar en distintas posiciones y, cada vez que me toca, trato de esforzarme para que todo salga bien. Si se puede, me gusta más jugar suelto. Pero con tal de jugar, juego de lo que sea”, reconoció.
Poco a poco, la pelota fue quedando de lado y Hoyos comenzó a explicar el porqué del crecimiento. Ya no es ese chiquilín que debutó en Primera hace poco más de un año. ¿Qué cambió? “Con todas las cosas que me tocaron vivir este año, crecí mucho, maduré. Es importante para mí, porque cada vez que me toca jugar puedo dar más”, confesó. Y agregó: “En este club te aconsejan mucho los referentes, como el Chavo, Sebastián, el Chino o el Chapu. Ellos te hablan, y eso ayuda mucho”.
Y la conversación derivó en el ámbito personal. Y allí, Michael contó la principal causa de su crecimiento. “Estoy por ser papá y eso me hizo madurar bastante”, manifestó. Así es, en noviembre se viene al mundo Ryan Benjamín y ese es un motivo más que suficiente para cambiar la mentalidad. “Tengo que aprovechar las oportunidades que me dan, no sólo por mí, sino por mi hijo que está por venir”, contó. Eso sí, hay algo que no cambia: “Los botines van a seguir siendo de color, me gustan así”, concluyó.
Fuente: Diario HOY
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