Una situación por demás particular se vio ayer cuando Diego Abal se encargó de dar el pitazo final lo que decretó una nueva derrota de Estudiantes al caer frente a Colón por 2 a 0. La mayoría del público albirrojo despidió al equipo con aplausos, pero Eduardo Berizzo se fue insultado, sobre todo, por un grupo de plateístas que se ubicaron detrás del banco de suplentes de Estudiantes.
Los hinchas descargaron su ira haciendo hincapié en la merma que ha tendido el equipo estudiantil desde que Berizzo se hizo cargo del plantel tras el alejamiento intempestivo de Alejandro Sabella a pocos días de arrancar la competencia oficial. La falta de resultados positivos en este ciclo de El Toto no hace más crispar los ánimos de algunos hinchas de Estudiantes.
"Comprendo el sentir de la gente, que expresa lo que ve y se va preocupada como nosotros por la derrota", explicó el entrenador en la conferencia de prensa tras el partido. En un encuentro anterior, Berizzo respondió a los insultos de un simpatizante, pero después -en una charla en off con los periodistas en el Country Club de City Bell- se disculpó diciendo en ese sector se encontraba su hija.
En la jornada de ayer, Berizzo abandonó el terreno de juego con la cabeza gacha; mientras que los simpatizantes le propinaban cualquier tipo de insultos y hasta le pedían que renuncie a su cargo. Sin dudas fue un momento de tensión, que se vio agravado cuando otro grupo de la parcialidad albirroja salió en defensa del entrenador.
En ese momento se arrojaron un par de golpe de puños entre ambas "facciones" de hinchas, pero el incidente no pasó a mayores debido a la rápida intervención de la seguridad privada que custodia ese sector del Estadio Ciudad de La Plata, que se encuentra justo en la boca de acceso y egreso de los jugadores al campo de juego. De este modo se apaciguaron los ánimos y cada grupo se retiró por su lado sin mayores inconvenientes.
Estudiantes no atravesaba una racha sin ganar de seis partidos desde 2005, cuando el equipo era dirigido por Mostaza Merlo. En esa ocasión sumó siete encuentros sin conocer el sabor de la victoria.
En tanto desde que Eduardo Berizzo es el técnico suma cuatro derrotas sobre siete encuentros jugando como local en el Estadio Ciudad de La Plata (Banfield, Godoy Cruz, Cruzeiro y Colón). Por primera vez, además, el Pincha perdió en esta condición contra un conjunto brasileño, que además significó la tercera caída como local en la historia de la Copa Libertadores después de un invicto de 27 años.
Los hinchas descargaron su ira haciendo hincapié en la merma que ha tendido el equipo estudiantil desde que Berizzo se hizo cargo del plantel tras el alejamiento intempestivo de Alejandro Sabella a pocos días de arrancar la competencia oficial. La falta de resultados positivos en este ciclo de El Toto no hace más crispar los ánimos de algunos hinchas de Estudiantes.
"Comprendo el sentir de la gente, que expresa lo que ve y se va preocupada como nosotros por la derrota", explicó el entrenador en la conferencia de prensa tras el partido. En un encuentro anterior, Berizzo respondió a los insultos de un simpatizante, pero después -en una charla en off con los periodistas en el Country Club de City Bell- se disculpó diciendo en ese sector se encontraba su hija.
En la jornada de ayer, Berizzo abandonó el terreno de juego con la cabeza gacha; mientras que los simpatizantes le propinaban cualquier tipo de insultos y hasta le pedían que renuncie a su cargo. Sin dudas fue un momento de tensión, que se vio agravado cuando otro grupo de la parcialidad albirroja salió en defensa del entrenador.
En ese momento se arrojaron un par de golpe de puños entre ambas "facciones" de hinchas, pero el incidente no pasó a mayores debido a la rápida intervención de la seguridad privada que custodia ese sector del Estadio Ciudad de La Plata, que se encuentra justo en la boca de acceso y egreso de los jugadores al campo de juego. De este modo se apaciguaron los ánimos y cada grupo se retiró por su lado sin mayores inconvenientes.
Estudiantes no atravesaba una racha sin ganar de seis partidos desde 2005, cuando el equipo era dirigido por Mostaza Merlo. En esa ocasión sumó siete encuentros sin conocer el sabor de la victoria.
En tanto desde que Eduardo Berizzo es el técnico suma cuatro derrotas sobre siete encuentros jugando como local en el Estadio Ciudad de La Plata (Banfield, Godoy Cruz, Cruzeiro y Colón). Por primera vez, además, el Pincha perdió en esta condición contra un conjunto brasileño, que además significó la tercera caída como local en la historia de la Copa Libertadores después de un invicto de 27 años.
Fuente: Diario EL DIA
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