Pocos recuerdan que la llegada de Mariano González a Estudiantes se reflotó una vez que se terminó de frustrar el regreso de José Sosa.
El exjugador de Racing, tras una pretemporada junto al resto de sus nuevos compañeros, tuvo que soportar que algunos se animaran a “pesarlo” con la vista, abriendo juicios de valor sobre su estado físico. Sin embargo, con el correr de los partidos se fue acomodando a lo que reclamaba el equipo en el sector derecho de la mitad de la cancha, y ayer se terminó de consolidar con la mejor actuación desde que volvió a la Argentina. Sin jugar para diez puntos, el tandilense fue una salida permanente y se encargó de generar la situación más peligrosa del partido a favor de Estudiantes cuando a los 30 minutos dejó a tres rivales en el camino y sacó un remate cruzado que salvó Barovero. Luego, en la parte final, fue siempre una carta de peligro partiendo desde la mitad de la cancha, y haciéndose cargo de las pelotas paradas.
Coria, alboroto y desorden
Muy lejos de mostrar el nivel que lo había caracterizado a lo largo de la pretemporada, Facundo Coria fue la carta más baja que jugó Estudiantes en el estadio José Amalfitani. Bien tomado por Augusto Fernández cuando intentaba pasar al ataque, nunca pudo gravitar con su constante habilidad, y pecó de egoísta para terminar algunas de las jugadas que supo elaborar.
En la parte final, se fue reemplazado sin haber podido consolidar una buena actuación en el equipo de Russo, justo en el momento cuando más lo necesitaba.
La única jugada clara que lo tuvo como protagonista en el primer tiempo no llegó a buen final, ya que decidió definir por encima del arquero de Vélez y la pelota se fue por encima del travesaño.
Fuente: Diario HOY
El exjugador de Racing, tras una pretemporada junto al resto de sus nuevos compañeros, tuvo que soportar que algunos se animaran a “pesarlo” con la vista, abriendo juicios de valor sobre su estado físico. Sin embargo, con el correr de los partidos se fue acomodando a lo que reclamaba el equipo en el sector derecho de la mitad de la cancha, y ayer se terminó de consolidar con la mejor actuación desde que volvió a la Argentina. Sin jugar para diez puntos, el tandilense fue una salida permanente y se encargó de generar la situación más peligrosa del partido a favor de Estudiantes cuando a los 30 minutos dejó a tres rivales en el camino y sacó un remate cruzado que salvó Barovero. Luego, en la parte final, fue siempre una carta de peligro partiendo desde la mitad de la cancha, y haciéndose cargo de las pelotas paradas.
Coria, alboroto y desorden
Muy lejos de mostrar el nivel que lo había caracterizado a lo largo de la pretemporada, Facundo Coria fue la carta más baja que jugó Estudiantes en el estadio José Amalfitani. Bien tomado por Augusto Fernández cuando intentaba pasar al ataque, nunca pudo gravitar con su constante habilidad, y pecó de egoísta para terminar algunas de las jugadas que supo elaborar.
En la parte final, se fue reemplazado sin haber podido consolidar una buena actuación en el equipo de Russo, justo en el momento cuando más lo necesitaba.
La única jugada clara que lo tuvo como protagonista en el primer tiempo no llegó a buen final, ya que decidió definir por encima del arquero de Vélez y la pelota se fue por encima del travesaño.
Fuente: Diario HOY
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