Son tres casos que ciertamente están en el tapete y son seguidos atentamente por los simpatizantes albirrojos. Concretamente: la llegada de Enzo Pérez, y los contratos de Germán Ré y Damián Albil.
Ayer, el empresario Miguel Pires dijo haber sido convocado por la dirigencia de Estudiantes a fin de interceder ante el Benfica de Portugal, dueño del pase del volante mendocino, para destrabar la situación que se ha plateado y que finalmente Pérez pueda jugar el próximo semestre, a préstamo, en la entidad albirroja.
La situación está complicada a partir de lo señalado por el presidente de la entidad lusa, quien dijo que "es jugador del Benfica y punto final", en alusión a los rumores que apuntan que el mediocampista quiere volver a su antiguo club.
Pérez no se presentó a entrenarse con el plantel del Benfica el pasado 27 de diciembre, y esto tensó más la situación.
El presidente Luis Felipe Vieira defendió que el Benfica "sabe lo que tiene que hacer" y los intereses del club están "por encima de los de cualquier jugador".
En lo que hace a la renovación del contrato de Ré, el defensor informó ayer que el tema ha avanzado pero no hay todavía una solución a la vista. "Me pidieron los dirigentes que fuera a hablar pero no a firmar. Falta el tema impositivo y algo más. El tema contrato sí está solucionado", comentó el Colorado.
Y en lo que hace a Damián Albil, el golero también tiene casi solucionado la renovación contractual. Hay charlas avanzadas con su representante. Albil jugó trece partidos en el último torneo en reemplazo del lesionado Justo Villar.
Sin embargo, algunos trascendidos indican que Estudiantes anda en la búsqueda de otro arquero y, en especial, de predicamento, más allá que, además de los nombrados, en el plantel están los juveniles Gerónimo Rulli y Agustín Silva.
Habrían sido ofrecidos el cordobés Germán Montoya, de Vélez, y Juan Pablo Carrizo, actualmente en la Lazio de Italia. La noticia caló hondo porque daba la sensación que el puesto estaba ampliamente cubierto. Hasta hubo quienes hicieron votos por el regreso de Mariano Andújar, quien fue desafectado del Catania italiano.
Ayer, el empresario Miguel Pires dijo haber sido convocado por la dirigencia de Estudiantes a fin de interceder ante el Benfica de Portugal, dueño del pase del volante mendocino, para destrabar la situación que se ha plateado y que finalmente Pérez pueda jugar el próximo semestre, a préstamo, en la entidad albirroja.
La situación está complicada a partir de lo señalado por el presidente de la entidad lusa, quien dijo que "es jugador del Benfica y punto final", en alusión a los rumores que apuntan que el mediocampista quiere volver a su antiguo club.
Pérez no se presentó a entrenarse con el plantel del Benfica el pasado 27 de diciembre, y esto tensó más la situación.
El presidente Luis Felipe Vieira defendió que el Benfica "sabe lo que tiene que hacer" y los intereses del club están "por encima de los de cualquier jugador".
En lo que hace a la renovación del contrato de Ré, el defensor informó ayer que el tema ha avanzado pero no hay todavía una solución a la vista. "Me pidieron los dirigentes que fuera a hablar pero no a firmar. Falta el tema impositivo y algo más. El tema contrato sí está solucionado", comentó el Colorado.
Y en lo que hace a Damián Albil, el golero también tiene casi solucionado la renovación contractual. Hay charlas avanzadas con su representante. Albil jugó trece partidos en el último torneo en reemplazo del lesionado Justo Villar.
Sin embargo, algunos trascendidos indican que Estudiantes anda en la búsqueda de otro arquero y, en especial, de predicamento, más allá que, además de los nombrados, en el plantel están los juveniles Gerónimo Rulli y Agustín Silva.
Habrían sido ofrecidos el cordobés Germán Montoya, de Vélez, y Juan Pablo Carrizo, actualmente en la Lazio de Italia. La noticia caló hondo porque daba la sensación que el puesto estaba ampliamente cubierto. Hasta hubo quienes hicieron votos por el regreso de Mariano Andújar, quien fue desafectado del Catania italiano.
Fuente: Diario EL DIA
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