Estudiantes hizo lo que quiso con All Boys, gracias a la calidad y la conducción de Verón. El Pincha goleó 3 a 0 pero la diferencia podría haber sido mayor.
En la previa Mercado había dicho sentir vergüenza por la posición que ocupa Estudiantes en el torneo. All Boys se siente preocupado por estar en la zona roja de los promedios. Entonces, la cuestión era hacerse de tres puntos que les lleve aire. El Pincha con toque de pelota se mostró más entero. El arranque del partido fue dinámico, los dos buscaron, pero producían poquito en las áreas.
El match se hizo cortado y, por momentos, algo impreciso hasta que apareció toda la jerarquía y la calidad de Juan Sebastián Verón. La Bruja habilitó a los 29’ y a los 32’ a Mariano González y a la Gata Fernández respectivamente para poner al Pincha arriba.
All Boys tuvo una sola llegada al arco de Albil por intermedio de Torassa en una que punteó la pelota, que se fue por poco afuera. Pero, la diferencia entre un equipo y el otro estuvo en que los platenses contaron con Verón, amo y señor de la pelota. Mucho para el equipo de Floresta que generó muy poco y no supo cómo controlar al ídolo Pincharrata.
Los de Pepe Romero intentaron reaccionar en el comienzo del segundo tiempo. Dominaron los primeros minutos pero, de a poco los de Azconzábal fueron retomando el dominio del partido. Se notaba mucho la diferencia de calidad de cada equipo y, por sobre todas las cosas, la experiencia para manejar los tiempos del encuentro. Verón, Braña y Mariano González no tuvieron oposición en el mediocampo, acompañados con el aporte de la Gata Fernández. Inclusive, hasta hubo tiempo para un gol de Boselli y después regular el esfuerzo. Por más que los locales les cedieron la pelota y la iniciativa a los visitantes, éstos no lograron inquietar y hasta podrían haber metido el cuarto. Porque Verón se multiplicaba, a pesar de sus limitaciones físicas, parecía que había dos, sí, fue Verón, Verón, qué grande…
Fuente: Olé
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